“El encapuchado observaba su cuaderno sin poder actuar.”
Andaba el encapuchado con su cuaderno sobre las rocas de un acantilado. Permanecía quieto y sombrío ante un paisaje verde. Su cuaderno, la herramienta de sus aventuras, lo mantenía cerrado desde hace mucho tiempo. Sabía que debía abrirlo y continuar la creación por la que fue encomendada pero se le dificultaba abrirlo. El sólo pensarlo parecía darle miedo. Mientras continuaba en su indecisión, un gnomo muy conocido por él se le acercó.
—¿Todavía no quieres abrirlo?— le preguntó el pequeño amigo.
—No creo poder abrirlo— dijo el encapuchado—creo haber perdido la capacidad para ello.
—Jamás se pierde una habilidad tan atada a tu alma—le dijo el gnomo acercándose a él— Sólo lo sepultas con tus temores e inseguridades.
A continuación el encapuchado pareció no escucharlo y el gnomo lo empujó hacia el acantilado.
— Ya era momento de que te lanzaras al precipicio y demostraras tu razón de existir— dijo el gnomo mientras caminaba hasta perderse de vista.
Cayéndose por el precipicio, el peligro pareció liberarlo de las cadenas de tedio y rutina que no le permitían abrirlo. Mientras caía, comenzó a sentir la vida y se llenó de alegría. Entonces abrió el cuaderno y antes de que su vida culminara en un trágico desenlace, el encapuchado se teletransportó hacia su nueva aventura.
Recuerdo la lectura como un hábito a muy temprana edad. Los libros infantiles, con todas esas imágenes, nos recuerdan aquella etapa de la niñez en que gozábamos con que nos leyeran un cuento antes de dormir. Cuando crecemos descubrimos que los libros comienzan a carecer de imágenes y perdemos el interés. Lo próximo que ocurre es una decisión pues, si decidimos prestarle atención a todo ese conjunto de palabras, un nuevo universo esta próximo a mostrarse ante nosotros.
La elección por la lectura
Todos quienes hemos tomado la decisión por abrir ese peculiar libro que nos marca y nos enamora conoce que su vida presenta cambios. Ciertamente esos cambios los podemos reconocer y afirmar sus beneficios. Tomando en cuenta estas observaciones a continación les presento algunos de ellos:
•Expande tus perspectivas- Leer un libro no necesariamente te otorgará un recuerdo exacto de lo leído pero indudablemente dejará una perspectiva perdurable. No es la imágen que vemos sino el lente por el que observamos. la lectura nos permite observar nuestra vida bajo distintos puntos de vista. Esto nos ayuda no sólo en la resolución de problemas sino también en la prevención de estos.
•Desarrolla tu imaginación- Las palabras generan ideas en nuestra mente. esas ideas inevitablemente se presentan bajo un lenguaje que podemos interpretar sensorialmente (ej. un conejo, el dulce, los aullidos, etc.). Cuando leemos, nuestra imaginación se pone en función y nos desarrolla mentalmente. El enfoque, la creatividad, la memoria y nuestro razonamiento son algunas de la facultades mentales que se desarrollan en la práctica.
•Altera tu realidad– Como mencioné, expandir nuestras perspectivas puede traer grandes cambios, uno de ellos será que altere tu realidad. Al leer, obtenemos ideas que consecuentemente pueden influir en nuestras decisiones y actitudes. Utilizando esto a nuestro favor podemos adquirir conocimientos acorde a nuestros sueños y posteriormente convertirlos en realidad.
•Te transporta- La lectura provoca que nuestra mente se transporte a las imágenes que se les presenta. Esto nos permite viajar a cualquier mundo y realidad alterna que tenga el libro contenido simplemente por la lectura del mismo. Podemos estar cautivos en cualquier lugar pero la lectura nos hace libres.
•Te relaja- Leer antes de dormir puede relajarnos de la tensión diaria. ¿Les ha pasado que cuando comienzan a leer les da sueño? Utilizar esto a tu favor puede traerte grandes beneficios a largo plazo.
•Te desarrolla socialmente- Leer te da temas de que hablar y compartir con los demás. Además es más probable de encontrar intereses comunes con la otra persona. El conocimiento es de interés por tanto te vuelve interesante. Nuestro desarrollo social actualmente esta más ligado por la lectura debido a las redes sociales y comunicaciones por mensajería. Estamos leyendo continuamente los pensamientos de otros pero sin descubrir todo aquello que nos otorga un buen libro.
Por esto, entiendo más que importante fomentar la lectura. Si bien puede desarrollar nuestras facultades mentales, también puede desarrollar nuestra sensibilidad y carácter humano. A todo aquel que no posea un hábito de lectura, le invito a que busque un libro con el tema de su interés y comience a leer. Si bien 10 minutos diarios pueden ser forzosos, imagínese sin los beneficios acumulados que pudo recibir.
En mi adolescencia odiaba leer. No fue hasta que leí un primer libro que me mostró la posibilidad de soñar. Ese libro aún lo releo y siempre me muestra algo nuevo entre sus páginas.
Les doy la bienvenida a la nueva página web de A. Y. Ortiz. Estoy muy entusiasmado con las posibilidades que esta página brindará en el futuro. Han sido muchos años de desarrollo de lo que ahora es A. Y. Ortiz y deseo dedicar este agradecimiento a narrar cómo se fue creando el concepto.
El recuerdo más antiguo de todo son los bocetos de personajes que luego tuvieron su historia. Para ese tiempo tenía alrededor de unos 10 años y uno de estos personajes fue Boggy de la saga Terra. En esos momentos simplemente era el puerquitodecerebrado. Igualmente en dichos entonces dibuje el logo que me ha representado desde entonces.
El logo fue uno de los diseños más antiguos…
Otro evento importante y que ocurrió paralelamente fue mi interés por las plantas carnívoras, bonsais y plantas raras. Esto apreciación comenzó por lo misterioso y extraño pero poco a poco me pareció interesante la naturaleza en su plenitud.
Comencé a escribir oficialmente a los 15 años con la novela Terra: El Sueño y el Engaño. Debo reconocer que anteriormente había escrito capítulos aun sin ser publicados de Terra y cuentos. La publicación del primer libro marcó el uso del nombre A. Y. Ortiz para identificar mi trabajo literario al igual que el logo.
Luego de ese libro siguieron varias publicaciones de libros, mi primera página web, artículos de temática variada, tutoriales escritos, el surgimiento de El Cuaderno del Encapuchado como microhistorias de un blog, diversas publicaciones de videos en Youtube y la primera página web de A. Y. Ortiz
Logo que se utilizó en la página de facebook.
Originalmente se había realizado la página a través de Wix usando el dominio como una redirección. Aun puedes visitar este enlace para que accedas al antiguo diseño. La página se descontinuó y el proyecto continuó a través de la página oficial de facebook.
Más tarde, creé el canal de Youtube con la intención de fomentar el interés por la literatura y el arte. Sin embargo, el canal se desarrolló en mi interés por la naturaleza lo que llevo a dar forma el proyecto Nemesia. Mi propósito siempre ha sido fomentar la armonización e integración con la naturaleza por lo que así se termino de definir en lo que se ha convertido para mi en un estilo de vida.
El video de introducción ha representado lo que se ha convertido en un estilo de vida…
Esta página es el inicio de muchos proyectos próximos. En esta primera fase estaré recuperando escritos antiguos e indexando todo el trabajo desarrollado en el pasado.
Todo se trata de superar los límites y vivir con pasión.
